¿Qué es SHEN YUN y por qué el partido comunista chino (pcch) quiere prohibirlo?
En una época, China era conocida como “la Tierra de lo Divino”. Esto reflejaba la creencia de que su gloriosa cultura había sido transmitida desde lo más alto. Toda la sociedad buscaba la armonía entre el Cielo, la Tierra y la humanidad, y dejaba que las cosas siguieran su curso natural. Pero en 1949, cuando el pcch tomó el poder, consideró que esta herencia espiritual era una amenaza a su ideología y durante las siguientes décadas intentó destruir estas tradiciones milenarias, llevando 5000 años de civilización al borde de la extinción.
En 2006, practicantes de Falun Dafa, una disciplina milenaria de la Escuela Buda, establecieron en Nueva York la compañía de danza y música clásica china Shen Yun Performing Arts, con la misión de revivir la verdadera cultura china de 5000 años.
En la antigua China, los artistas buscaban inspiración en lo divino, meditaban y practicaban la virtud. Hoy los artistas de Shen Yun siguen esta noble tradición, practicando Falun Dafa. Esta es una de las razones por las que el público siente que hay algo diferente en Shen Yun.
El pcch se ve amenazado porque Shen Yun revive la verdadera cultura tradicional china y sus valores divinos que se perdieron bajo el comunismo. Además, la disciplina milenaria Falun Dafa está siendo brutalmente perseguida por la China comunista desde el año 1999 y muchos artistas de Shen Yun tuvieron que escaparse de China o son huérfanos cuyos padres fueron perseguidos hasta la muerte por el pcch.
¿Por qué Falun Dafa es perseguido en China?
Falun Dafa se basa en tres principios universales: Verdad, Benevolencia y Tolerancia. Sus enseñanzas promueven la cultivación espiritual y la elevación moral, de forma libre y automotivada. Comenzó a difundirse en 1992 y en pocos años más de 100 millones de personas en China abrazaron nuevamente una vida espiritual, algo que había sido aniquilado por el pcch.
Esta enorme popularidad fue vista por el régimen chino como una amenaza a la doctrina comunista. En 1999, el entonces líder chino Jiang Zemin, etiquetó a Falun Dafa como una secta y lanzó una persecución sin precedentes, utilizando toda la maquinaria estatal de represión y todos los medios de comunicación para eliminar a Falun Dafa. La persecución incluye una campaña de desinformación para engañar al mundo difamando a Falun Dafa en todos los ámbitos y en cualquier ocasión. Por sus acciones perversas y sus métodos de manipulación, control y engaño sin precedentes en la historia de la humanidad, el pcch es considerado como la verdadera “mayor secta perversa” del mundo.
La persecución del pcch se extiende hasta Argentina
Para impedir que se revele la verdad sobre la brutal persecución religiosa que existe en China, todas las embajadas chinas en distintos países tienen órdenes de difamar a Falun Dafa, restringir las voces y actividades de los practicantes de Falun Dafa a nivel mundial, e interferir con las presentaciones de Shen Yun en todo el mundo.
La persecución a Falun Dafa en suelo argentino, bajo órdenes de la embajada china, se ha manifestado en actos de violencia, golpizas y encarcelamiento a practicantes argentinos con el objetivo de silenciarlos. Incluso esta misma embajada presionó al Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto para impedir que Falun Dafa se reconozca como una religión, a pesar de que ha reconocido a más de 4000 llamadas “religiones” en todo el país.
No podemos permitir que el pcch decida sobre las artes en Argentina
En Argentina, la embajada china interfiere para boicotear las presentaciones de Shen Yun. En el año 2009 presionó a la Cancillería para no otorgarles el visado a los artistas. También amenazó a teatros privados para que no sean alquilados a Shen Yun.
Desde hace más de 10 años buscamos que Shen Yun pueda actuar en nuestro Teatro Colón. Sin embargo, por presión del pcch y de la embajada china a las autoridades locales, Shen Yun tiene negada su presentación en el Teatro Colón y nunca pudo alquilarlo.
Cediendo a esta ilegal e inescrupulosa demanda, las distintas autoridades del Teatro Colón se han mantenido en silencio ante las cartas de pedido formal o utilizan evasivas astutas, respondiendo que no hay fechas disponibles, incluso para varios años a futuro. ¿Acaso puede ser esto verdad? Esta conducta desvergonzada no es digna de las autoridades de uno de los principales teatros del mundo y atenta contra el sentimiento abierto y generoso de los verdaderos dueños del Teatro Colón: los argentinos.
No podemos aceptar que el partido comunista chino decida qué podemos ver los argentinos en nuestro Teatro Colón
Shen Yun Performing Arts es la principal compañía de danza y música clásica china del mundo. Fue creada en Nueva York en 2006 con la misión de revivir la verdadera cultura tradicional de China, inspirada en lo divino, y compartirla con el mundo.
Shen Yun se presenta en los mejores teatros del mundo transmitiendo bondad y fe, dejando al espectador repleto de paz y esperanza. Con un espectáculo que trasciende el entretenimiento, Shen Yun revive la cultura divina y la belleza del mundo antes del comunismo.
Dado que el partido comunista chino es en su esencia ateo, ve la misión de Shen Yun de revivir valores y la creencia en Dios como una amenaza, y por eso, ha orquestado una campaña de difamación y censura contra la compañía en todo el mundo.
En Argentina, a través de su embajada, logró que las autoridades del Teatro Colón rechazaran el pedido de alquiler del teatro por más de 10 años, argumentando todo tipo de excusas irracionales.
Como argentinos, exigimos un país soberano y sin injerencia de un régimen extranjero, donde Shen Yun pueda actuar sin censura en nuestro Teatro Colón, Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Como argentinos, exigimos un país soberano y sin injerencia de un régimen extranjero, donde Shen Yun pueda actuar sin censura en nuestro Teatro Colón, Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Vea los videos con imágenes nunca antes vistas que revelan la persecución religiosa en suelo argentino y muestran cómo el pcch controla nuestra sociedad, desde el ámbito político hasta el cultural.